Argentinien

Lolo, Federal, Entre Rios:

Domingo 12 de Abril de 2020.
Todo muy tranquilo, igual que todos los demas dias! Yo estoy feliz.
Estamos encerrados en la casa, pero aca no se nota, ya que somos criadores
de vacas, vivimos en el campo a 22 Km de la ciudad mas cercana, Federal,
en el noreste de Argentina, y esta es nuestra vida normal. O casi normal:
normalmente trabajan aca 5 personas, y ahora solo 2, que han decidido
pasar la cuarentena encerrados con nosotros. Vivimos aca tres familias:
la de mi hermano, la de mi hija y la mia, en casas separadas por uno y
dos Km. Por esto, lo de „encerrados“ es muy relativo.
Han cambiado los viajes a la ciudad, disminuyendo de diez, a uno por semana.
La produccion se vera resentida eventualmente, pero esperamos que no mucho.
Hoy pasamos la pascua con mi hija y mi nieta de dos anios, que busco‘ sus
primeros huevos de pascua con gran alegria. Salimos a caballo, y fue un dia
hermoso, como los otros de este mes de otonio.
Esperamos que la produccion no se vea muy afectada, por ahora. Solo se hacen
los trabajos basicos, pero ya nos estabamos preparando para esto.
Como se vera‘ afectado el pais, es otra cosa! La Argentina es un pais pobre
(*potencialmente* rico, pero pobre), acostumbrado a vivir una grave crisis
economica tras otra, con una inflacion anual de 70 % promedio sobre los ultimos
60 anios, y a punto de dar su septimo u octavo default de su deuda externa.  
Todo esto *antes* del corona virus! Realmente no me puedo imaginar que va a
pasar en un mes o dos. Chernobyl! El gobierno promete ayuda economica a todo
el mundo, pero tenia deficit, cero credito y alta inflacion ANTES del virus.
Ahora, con la economia en coma, con suerte recibira la mitad de los impuestos
normales. No me puedo imaginar…
Yo estoy en este pais, me va a llegar, va a ser grave, deberia estar preocupado.
Lolo Vera, 72

_______________________________________________________________________________-

Nidia, Federal, Entre Rios:

Tengo 66 años y vivo en una estancia , en el norte de la provincia de Entre Rios , Argentina . En casa vivimos mi marido y yo , pero una de mis hijas con su hijita de 2 años , vive a 400m de nuestra casa y comparten casi todo el día con nosotros . Cómo la mamá trabaja administrando el campo , los abuelos nos hacemos cargo de la nieta gran parte del día . Tanto mi marido ( 72 años ) como yo estamos jubilados , aunque el supervisa y aconseja a nuestra hija que se está haciendo cargo de todo el trabajo de la estancia .
Esta cuarentena que se nos impuso , debido a la pandemia , en realidad no ha cambiado mucho nuestra vida acá en el campo . El cambio más grande es que los mayores no vamos al pueblo para nada ( antes íbamos dos o tres veces por semana ) . Carolina , el primo o el capataz son los que se ocupan de las compras de comestibles y todos los trámites en el pueblo . No vemos a los pocos parientes que tenemos en el pueblo , pero nos comunicamos por wazzup .
Como acá en la estancia somos muy pocos, la familia de mi cuñado ( 3) , Carolina y su hija , el capataz y su familia (4 ) , un peón y nosotros , no hay restricciones de contacto social . Tenemos plena libertad para movernos y estar juntos .
Hoy Domingo de Pascua , almorzamos con nuestra hija y nuestra nieta , Amelia buscó huevitos con su canastita , lo diferente : no estaban la tía y unas amigas que siempre comparten Pascuas con nosotros !!! Pero las vimos por vídeo !!!
Tengo a mis otros hijos repartidos por el mundo , una en Sydney con su pareja , otro en Suiza con su esposa y mi otro nieto , y la otra en Bs As con su pareja , y tratamos de vernos por vídeo conferencia dos o tres veces por semana y a diario nos enviamos mensajes en grupos de chats .
No ha habido cambio en el trabajo en la estancia porque como somos productores de alimentos , estamos autorizados para seguir trabajando , hay menos personal , pero se sigue trabajando .
A nivel familiar , yo que normalmente viajo cada mes o 40 días a Bs As , y permanezco allá una semana o 10 días que comparto con mi hija y mis amigas no lo puedo hacer . Por supuesto que hay más mensajes en los chats y llamadas a amigas y a mi hija !!! Ni hablar de viajar a Europa , tenía viaje para ir a Suiza a cuidar a mi nieto , pero será para más adelante !!!
Mi vida diaria no ha teñido grandes cambios , tal vez tenga más cosas que hacer en la casa , porque no tengo ayuda , pero reparto mis días entre las tareas del hogar ( limpieza , lavado , cocinar ) y mis actividades : leer , labores ( needlepoint , crochet , bordar ) hacer sudokus , estudiar francés , televisión y Netflix , las plantas y cuidar a la nieta . Pero son las cosas que siempre hago acá , nunca me alcanza el día para hacer todo lo planeado !!!
Tal vez me inquieta la perspectiva del tiempo , son horas , días que pierdo de compartir con mi familia , mis hijos , mi nieto , y mis amigas , ya no soy joven !!!
Es extraño no saber cuándo va a terminar esto , cuando se acabará la cuarentena , y con qué nos vamos a encontrar ! Un pueblo más generoso , más pensante , más solidario o más egoísta ???
Yo no he tenido aún angustia , tristeza , pero varias de mis amigas si , y trato de darles fuerza y esperanza , pero entiendo la situación de ellas , algunas solas en sus departamentos , encerradas !!!!
Pienso que tal vez resiliencia debería ser la palabra que todos debemos tener presente en esta pandemia , somos los arquitectos de nuestra propia alegría y de nuestro destino .
NIDIA
Sent from my iPhone

_________________________________________________________________________________

Sara, Buenos Aires:

Mi nombre es Sara, tengo 27 años y soy de Venezuela y llevo casi tres años viviendo en Argentina, pues las circunstancias de mi país así lo decidieron.

Mi familia sigue viviendo en Venezuela y casi todas mis amistades están regadas por el mundo.

Soy Licenciada en Psicología, actualmente me encuentro realizando la convalidación de mi titulo para poder ejercer como psicóloga en Argentina. Por lo cual, el pasado marzo, debí haber comenzando clases de las materias que me toca revalidar. Sin embargo, debido a la situación mundial, estas clases se vieron postergadas.

Vivo con mi novio y nuestro perro de 5 meses, Mi novio es Argentino y su familia vive en la misma cuadra que nosotros, a uno escasos metros. Esto ha sido beneficioso, ya que en un par de ocasiones hemos podido ir a visitarlos.

Mi novio trabaja desde la casa, por lo cual esta casi todo el día ocupado en la computadora. Yo, recién esta semana arranqué con clases virtuales, las cuales me ocupan una parte del tiempo.

Durante el día, suelo hacer ejercicio, muchas personas a través de los lives de Instagram se han dedicado a hacer clases en vivo, lo cual me motiva bastante, pues siento que estoy compartiendo con otras personas así sea de forma virtual.

Suelo ser una persona bastante activa fisicamente, me gusta mucho ir al gimnasio, salir a caminar, etc. Así que estas clases han sido una vía que me ha permitido seguir con algún tipo de actividad física.

Nuestro departamento no es muy grande, por lo que debo hacer estos ejercicios en la habitación mientras mi novio trabaja, lo cual no es lo más cómodo del mundo.

Suelo entretenerme viendo series o películas, pasó mucho tiempo en Netflix, por lo cual estoy muy agradecida que tengamos buen internet.

EL día que decretaron la cuarentena total estaba tranquila, pues sabía que toda mi familia y allegados iban a estar bien. Sin embargo, los días anteriores sí estaba muy preocupada, ya que la situación de Venezuela es bastante grave y sé que una pandemia como esta podría acabar con todo el país.

Tengo la fortuna que mis padres viven bien y tienen todas sus necesidades cubiertas. Y a pesar de que mi hermana vive allá, me entristece que estén solos en este momento. Por suerte, tienen a nuestros dos perritos que los mantienen ocupados y les hacen compañía.

En encierro ha sido menos llevadero de lo que pensaba, soy una persona que le gusta mucho estar en casa, por ejemplo, me gusta quedarme viendo películas los fines de semana. Pero el hecho de que este prohibido salir y que no sea por mi voluntad propia me ha afectado.

Antes de esto, teníamos grandes planes, estábamos a punto de mudarnos a un departamento a una mejor zona, con más espacio y mas iluminación. Pero como todo, esto también esta paralizado, cosa que me preocupa bastante ya que la economía en Argentina no es la más estable y con todo esto, se podría venir a abajo todo.

Trato de no pensar tanto en eso y mantenerme activa, haciendo cosas de la casa, cocinando, arreglando cosas. Viendo series, hablando con mi familia, etc. Siento que tenemos la fortuna de que a través de internet podemos estar comunicados y eso nos hace sentir menos solos y aislados.

Espero que salgamos de esto pronto y que todo vuelva a la normalidad, mientras tanto, tratamos de hacer lo mejor que se puede con lo que tenemos.

Mientras tanto, nuestro perro nos mantiene entretenidos haciendo travesuras y jugando, como cualquier otro cachorro.

__________________________________________________________________________

City – Country: Buenos Aires – Argentina Name – Age: Tomas – 35 Occupation: Engineer

The COVID crisis has affected the world like no other crisis so far has. This is the very first time that an event originated in a single country has affected the entire planet. Regardless of age, sex or social background, this disease has impacted us all.

My daily life changed in many aspects. First, I lost the freedom to be outside home, to walk, to practice sport or to travel from one place to the other. A fundamental constitutional right was suppressed; the so called “freedom of circulation“, a right that every citizen in my country is entitled to by law. I have also lost the possibility of spending time with the people I care, like my family and my friends. I was planning on doing a road trip to visit my younger sister, whom I don’t see since January. Because of the crisis, sadly this plan had to be cancelled.

Life during the quarantine is tough, one always has to try to find ways to keep entertained without falling into the temptation of checking and re-checking online newspapers, frantically citing updated figures of deaths and infected across the world.

I have come to the decision of limiting the amount of time I spend reading online newspapers. I have realized that this habit was not doing me any good, so I stopped doing this, and I can say that now I am feeling less anxious or worried.

It is interesting to see how people behave during these periods of crisis. The very first reaction of many across the world (me included), was to go to the supermarket to buy as much food (or toilet paper in some countries) as possible. Many of us did this even though we knew that if everyone did this, there wouldn’t be enough food for everyone. Our first (animal) instinct was to try to think only about ourselves. In this regard we are indeed still animals and we behave as such. This very same individual behavior observed in people was also noticed among nations or group of nations deciding to prevent or halt the circulation or trade of medical equipment to guarantee their own national supply. Just to be clear, I am not judging, I am not saying that what they did is right or wrong, this is just an observation.

What I have also noticed is that younger people tend to be less aware of the danger of becoming infected with the virus. On the other hand, older people seem to be more concerned about getting ill (of course there are always exceptions). This makes sense since according to the information that we get from the media, older people seem to be more likely to die because of pre-existing health conditions, or having weaker inmune systems.

Regarding the obligation to wear face masks, initially there wasn’t a clear message from the experts (i.e. the WHO) on wether it was advisable to wear masks or not. What I have perceived is that most of the people felt encouraged to use the masks just because they were trying to protect themselves, not because they were trying to prevent the dissemination of the disease to other people. Again the selfish component of our animal-like behavior presented itself.

So far I have only talked of negative aspects concerning the virus. It is true that many people has been eager to help; like all the doctors nurses, and health-workers exposing themselves to the danger of becoming infected while trying to assist other human beings. There are also examples of people offering themselves to bring food, groceries and medicine to quarantined people. There are even companies that decided to start producing alcohol-gel and other products to be delivered free of charge. There are many Youtube videos of people explaining how to create face-masks at home using the most ingenious ideas.

My biggest and immediate fear now is for the wellbeing of my loved ones. But I also fear for the way our government is trying to handle the crisis on a national-scale. It seems to me that they are not assuming the responsibility for the decisions that must be made, decisions that I know are tough, but must be made anyways.

Public employment in my country is very high, and a lot of money from the taxpayers is spent to maintain the public apparatus, but this doesn’t mean that our health system is as good as it needs to be given the current critical situation. In fact, during the last decades, not much importance has been given to the public health service. So if ones reads what the virus is causing on developed countries, countries that have a serious commitment to their public health systems, what can we expect to happen to us here when the peak of the epidemic strikes?

Being isolated makes you appreciate things we always took from granted, like walking outside or enjoying the company of friends and family. I think this is a good opportunity to have time to think about ourselves and for individual reflection as well.

It would be good for all of us, both people and nations, to learn what we have done wrong. It would be good to see what can we improve to avoid or minimize next time an epidemic like this happens. I believe we have the technology, the intelligence and the will to prevent this from ever happening again.

This is one is one of the many difficult challenges we face as human species. I see this as a pilot experiment to test us to see if we can handle greater challenges like global warming, contamination, overpopulation, social inequality, etc.

I only hope that the thousands of lives lost during this crisis are not in vain, I really hope we can learn something out of this horrendous experience.

_________________________________________________________________________

May, Buenos Aires:

Hola, mi nombre es María, vivo en Temperley, Buenos Aires, Argentina.

Soy casada, tengo 66 años, jubilada. Vivo con mi marido.

Tenemos cuatro hijos, cinco nietos, dos de ellos viven en la ciudad de Buenos Aires, y dos en Europa.

Mis pensamientos sobre la cuarentena:

Quizás debido a nuestra edad, no estamos sufriendo demasiado. Tenemos una casa confortable, con jardín, y como la casa es vieja, siempre hay muchos arreglos para hacer. Idem el jardín.

Ambos somos lectores, nos gusta cocinar, y hacer cosas con las manos (ebanistería, acuarelas, costura, tejido), así que estamos aprovechando estos días para dedicarnos a lleno a estas actividades. Ayuda que el tiempo está hermoso, si bien entrando en el otoño, hay un sol radiante.

Nuestro barrio siempre fue muy tranquilo, calles adoquinadas, lo que impide que el tráfico circule a gran velocidad. Tenemos buenos vecinos, (salvo uno).

Mi día consiste en:

Desayuno con mate, leo las noticias online, la BBC y el diario local Perfil, que no es demasiado sensacionalista. Limpio un poco la casa, y un par de veces a la semana voy al almacén a comprar lo que haga falta, voy con barbijo y ahora con guantes, no por convicción, si no que algunas personas se sienten más tranquilas si me ven así. En el almacén solamente podemos entrar de a dos personas, así que a veces hay una pequeña cola, que todos aprovechan para conversar un poco (siempre manteniendo más o menos los dos metros). Almuerzo, voy a uno de los cuartos que se llena de sol a la tarde y pinto, hago Sudoku, leo el Economist (que increíblemente la sigue trayendo el cartero). Luego, lunes sigo mis clases de francés online que comencé hace tres años, sigo con zumba por Facebook live, las clases presenciales ahora son virtuales; y los días que no hago zumba sigo mis clases de yoga via Zoom. Mis hijos llaman via Facetime dos o tres veces por semana, y veo cómo van creciendo los nietos. Cena, y partido de Scrabble con mi marido, hace muchos años ya que lo hacemos. Luego mi marido va a mirar televisión, generalmente programas en You tube, y yo series viejas inglesas o irlandesas, siempre, siempre, comedias. No miro más noticias hasta el día siguiente.

Algunos días con mi vecina llevamos sillas hasta el cerco y nos fumamos un cigarrillo (ella me convida, yo no compro ni tengo en casa), y nos comentamos las últimas novedades, que no son muchas, aunque comienza a haber robos en el barrio nuevamente. Posiblemente porque no hay nadie en la calle, los ladrones entran a la fuerza a las casas, amenazan a los ocupantes y se llevan lo que puedan. Esto no es nada nuevo, pero se había calmado en las últimas semanas. Supongo que los ladrones también tienen que comer.

Cuando voy a la cama siempre con un libro, ninguna pantalla. Sí llevo un teléfono viejo con podcasts, por si no puedo dormir bien. La BBC tiene muy buenos podcasts, humor, ciencia, historia, literatura…

Bueno, esto suena todo bastante aburrido. Por lo que converso con amigos y familia: uno de mis hijos que vive en un pequeño departamento en Buenos Aires no está tan contento, pero como tiene muchísimo trabajo no es tan terrible. Vive con la novia, que es un arma de doble filo, pero se llevan bien. Mi hija también en Buenos Aires, ella está feliz, dice que le encantaría poder hacer home office siempre, pero el novio que es más sociable sufre un poco. Mis hijos en Europa se quejan, pero realmente no sé de qué. Tienen casas grandes, jardines grandes, no les falta nada.

Extrañamos los fines de semana, que nuestros hijos vienen casi siempre, y compartimos asados y partidos de cartas.

A mis nietos solamente los vemos por Facetime, como fue siempre, así que eso no cambió.

Mis amigos se van acostumbrando, como todos lo estamos haciendo. Y aprendiendo a resignarnos… Todos siguen haciendo cursos online, las que son maestras siguen dando clases online, todo un desafío, pero algún progreso se logra. Hoy charlé por el cerco con mi otra vecina, psicóloga, ella sigue con algunos pacientes online, pero muchos no quieren. A ella tampoco le gusta, pero tiene que hacerlo igual! Y todos hemos mejorado nuestras habilidades culinarias.

Ahora, con respecto al futuro… quién sabe. Creo que muchos aspectos del trabajo van a cambiar, como debería haberlo hecho hace mucho tiempo, aunque me parece que dentro de un par de años las cosas van a volver a como siempre fueron. Sí me preocupa muchísimo la economía, la Argentina no andaba bien, y ahora va a ser mucho peor. Los robos y saqueos siempre están por rebrotar. El gobierno hace lo que puede, pero la corrupción es endémica.

Bueno, espero que les sirva,

May